Extracto de La Cosmogonía Liminal
El portador de alma está en un constante estado de cambio y desarrollo que es el resultado de una danza entre la plantilla maestra,
las EIND (Estructuras de Información No-Derivadas) y la molécula de ADN presente en cada célula. Al evolucionar el portador de alma de la especie, la molécula de ADN progresivamente activa su antena y responde a los organizados campos de información de dimensiones superiores que hacen posible que el portador de alma integre más completamente la conciencia del alma. A medida que la conciencia del alma se introduce en el portador de alma con una mayor fuerza vibratoria e integración, altera vibratoriamente al portador de alma. Esto sucede generalmente en tres formas distintas:
1. Los centros de energía del portador de alma (algunas veces denominados chakras) son los conductos de los campos de EIND hacia el portador de alma –en todos los niveles— física, emocional, y mentalmente. Este incremento de energía de las EIND cambia vibratoriamente al portador de alma, ocasionando que tenga un mayor acceso a la conciencia del alma.
2. Conforme la frecuencia del alma es accedida, el portador de alma aprecia mejor y toma más conciencia que ésta es la expresión de la onda portadora de un fragmento de Dios interactuando con los mundos del tiempo lineal, materia cristalizada, y espacio tridimensional. Esta nueva percepción presagia una identidad transformadora y cambio de valor.
3. La molécula de ADN es tanto una antena que sintoniza las EIND y la plantilla maestra, así como un emisor que transmite sus transformaciones que son un resultado de su contacto íntimo adicional con la conciencia del alma. Esta transformación es una frecuencia vibratoria que es comunicable a las moléculas de ADN de los otros restantes dentro de la especie, incluso afectando a especies relacionadas.
El alma está sintonizada a las EIND y opera en su interior porque este es el campo vibratorio que es nativo de su esencia. Al tiempo que un mayor porcentaje de la especie incorpora su conciencia del alma, se vuelve más fácil para el resto de los miembros hacerlo igualmente.