En tu Corazón

Si tú puedes llevar tu Identidad hasta la perspectiva de Unidad con el Espíritu Universal 
sostenerla al enfrentar la resistencia de la vida, entonces tú habrás dejado el viejo paradigma. 
Y el Ser Eterno que vive en tu Corazón te proporcionará la Guía que necesitas.


Debes saber que cuando experimentas el mundo material no lo estás experimentando solo. Y esa es una distinción muy sutil la que estoy por hacer, pero es importante: Tú puedes conversar con Dios. 

Puedes tener conversaciones de verdad y amor, y eso está bien y es acertado, porque eso es educación. Pero al avanzar en la vida es indispensable sentir la Presencia de Dios  para experimentar juntos el mundo terrestre como Uno. Eso es co-creación y eso es un paso de dimensiones considerables separado de la educación. 

Siempre es entre tú y Dios, una pluralidad de intercambio, si lo prefieres.

Co-creación no es una pluralidad en el mismo grado que lo es la exploración del mundo material como uno. Dios y tú son Uno, y conforme avanzas a través de tus experiencias de vida, Dios ve y escucha a través de tu instrumento humano, tocándote ligeramente con el codo hacia esta dirección o aquella porque has invitado Su Presencia en tu corazón.

El corazón o sistema emocional humano es el órgano principal de percepción relativa a las frecuencias ultra-finas de las dimensiones superiores. Si tú invitas a Dios en tu corazónsi tú sientes ésta Presencia floreciendo, entonces al experimentar tu vida puedes sentir eso que está siendo hecho co-creativamente con Dios en el momento, no como si experimentaras la vida y luego reportaras a Dios mediante una plegarias o una meditación donde buscas consejo sobre esta o aquella decisión. Así es cómo sabes cuándo estás en el sendero correcto.

Permíteme agregar una cosa más. Tu ego tiene una contraparte eterna y el propósito de tu ego se ha tenido en alta estima, está enraizado en un contexto histórico que está rápidamente deslizándose dentro de la irrelevancia. El Paisaje de Creación está siendo renovado, por así decirlo, para permitir una reacción en cadena que barrerá este planeta y lo llevara junto con sus criaturas a nuevos campos vibratorios. 

Ahora bien, el ego ha estado encerrado en el miedo y la falta de confianza. Es como si estas cualidades estuvieran fuertemente codificadas dentro de la especie humana. Las ideologías, estén basadas en la ciencia o en la religión, están aún así amarradas al miedo. Ellas bloquean las emanaciones de las frecuencias superiores en las que el instrumento humano fue diseñado para funcionar. Esa es precisamente la razón por la que el individuo es Soberano y por qué es tan crítico que ellos mismos se activen y vivan una vida centrada en el amor, porque sólo cuando exista un número suficiente de humanos podrá empezar una reacción en cadena de conciencia, la conciencia de la eternidad.

Las fuerzas materiales responderán a esta frecuencia y se volverán la fuerza que hará real la eternidad sobre el plano terrestre. En los Lyricus tenemos un refrán que dice así: “Los Amos de la Materia se volverán los esclavos de la eternidad.” 

Es un proceso de identificar el cambio, de tal forma que cada individuo pueda cambiar las corrientes de miedo y culpabilidad hacia las corrientes de amor y entendimiento. Porque solamente en las corrientes de amor te das cuenta de que no eres la forma que animas, sino más bien las frecuencias energéticas de la animación en sí misma. Y éstas frecuencias ¿de dónde crees que proceden? De la Primera Fuente, de nuestro Creador. Y estas frecuencias bailan en el momento, ellas no conocen el pasado ni el futuro, ellas viven en el ahora. Así que los pensamientos y sentimientos que buscan en el pasado o futuro, pueden restringir las circulación de estas delicadas frecuencias, y estas frecuencias, como el flautista [de Hamelin], te conducen hasta el punto, hasta el mismo momento en que estés abierto a la transformación.

Nosotros tenemos un refrán que dice: “Si tú estás pelando una naranja no pienses en una manzana.” En otras palabras, permanece en el momento, porque es ahí donde las frecuencias de animación ocurren. Ahí es donde yace tu poder.

La Primera Fuente nos permite elegir nuestro destino. 
Vivir una vida centrada en el amor, y seguir la ascensión del planeta 
o vivir una vida basada en el miedo 
y permanecer en la rejilla de la frecuencia tridimensional 
con sus limitaciones inherentes intactas.